Mindfulness ¿Mejora el humor?

Descubriendo el Mindfulness

Descubrí Mindfulness en mis investigaciones sobre innovación educativa. Todos los estudios apuntaban a la necesidad de trabajar la Atención y el Clima emocional como paso previo a introducir mejoras en cualquier sistema educativo.

Antes de hacer uso de la Tecnología, Metodologías Innovadoras como el Trabajo Cooperativo, el Trabajo por Proyectos o la Gamificación, había que trabajar la educación socio emocional de los alumnos/as.

Así que decidí anotarme a un curso de Mindfulness para averiguar de qué se trataba. Había investigado bastante pero no conseguía resolver mis dudas sobre si consistía en posturas de Yoga, Meditación, Relajación, etc.

Tampoco tenía muy claro si sería para mí. Siempre había tenido mucha vida interior y creía que me conocía bastante bien y que no necesitaba de ninguna técnica para entender las cosas que hacía bien o mal o plantearme cambios.

La primera clase de Mindfulness

Así llegué a mi primera clase. Lejos de ser ninguna sesión de espiritualidad fue algo de lo más natural. Dorinda, nuestra maravillosa docente, nos explicó las teorías que sustentan el Mindfulness y comenzamos a practicar.

Lo más curioso fue descubrir que se realizaba sentad@ lo que me hacía pensar que es una práctica que se puede realizar en cualquier sitio.

Lo segundo, que parecía fácil, sólo tenías/podías concentrarte en tu respiración y apartar con amabilidad los pensamientos que viniesen a tu mente. 

Y lo tercero, cualquier persona podía practicarlo, en nuestro grupo cada un@ habíamos llegado por un motivo diferente.

Práctica semanal de Mindfulness

A partir de ahí cada semana nos planteó prácticas que debíamos realizar en casa.

Por supuesto, todo basado en estudios científicos y en la gran experiencia de nuestra docente. Fue bastante divertido practicar e ir descubriendo una nueva forma de afrontar tu día a día.

Mi humor cambió a las pocas semanas de iniciar la práctica, tenía un mayor control sobre mis impulsos y utilizaba la práctica ante situaciones estresantes a las que tod@s debemos enfrentarnos:

Un jefe exigente, una madre/suegra pesadilla, un compañer@ de trabajo que te saca de quicio, un mal conductor en carretera….

Durante 8 semanas nos vimos los jueves a última hora del día para comentar en grupo nuestras sensaciones emociones y pensamientos y continuar aprendiendo nuevos aspectos del Mindfulness.

Sin duda, el formar parte de un grupo, fue lo más importante para interiorizar la práctica y aprovechar la formación.

Conclusiones

1.Debes asistir a tu primer curso de Iniciación al Mindfulness de 8 semanas sin ningún tipo de expectativa

2.Cualquier persona puede practicarlo pues cada uno lo aprovechará de una forma diferente ( Manejo del estrés, Empoderamiento, mejora de las relaciones con tu entorno, tratamiento del dolor…)

3.No dejes nunca de practicar, si descubres una herramienta para estar mejor, cómo no hacer un pequeño esfuerzo para que forme parte de tu día a día?